El equipo de básquet de San Lorenzo se encuentra inmerso en su segunda semana de trabajos de pretemporada, con la mirada puesta en el inicio de la Liga Nacional. El plantel, bajo la supervisión del cuerpo técnico, cumple con intensas jornadas de entrenamientos en Boedo, combinando sesiones en cancha y en gimnasio para lograr la mejor puesta a punto física y táctica de cara a la exigente competencia que se avecina.

Los jugadores están llevando a cabo un riguroso plan de preparación que incluye trabajos de doble turno. Las mañanas están dedicadas a la parte física, con ejercicios de fuerza y resistencia que buscan potenciar las capacidades individuales de cada uno. Las tardes, por su parte, se centran en los aspectos tácticos, con ejercicios de ataque y defensa, sistemas de juego y la integración de los nuevos jugadores al grupo. El objetivo principal es construir una base sólida que les permita afrontar de la mejor manera cada partido de la temporada.

La pretemporada es un período fundamental para la cohesión del equipo. Es el momento de que los nuevos jugadores se adapten a la dinámica del club y se familiaricen con sus compañeros. El cuerpo técnico está enfocado en generar un ambiente de trabajo positivo y en pulir cada detalle para que el equipo funcione como una máquina aceitada. El compromiso y la dedicación de los jugadores en cada entrenamiento reflejan las altas expectativas que hay puestas en este plantel.

El trabajo en el Polideportivo Roberto Pando no se detiene. El equipo busca consolidar su identidad de juego y alcanzar un nivel competitivo que le permita ser protagonista en la Liga Nacional, una de las competiciones más importantes del país. Los hinchas del Ciclón esperan con gran entusiasmo el debut de su equipo y confían en que el arduo trabajo de la pretemporada dará sus frutos en la cancha.